El verdadero hombre de mi vida. No sabes cuanto me duele no estar este día contigo. El único deseo que pido, es que no sea el último, por favor.
Ochenta y cinco años de vida, y veintidós desde que tuve el placer de conocerte. El primer recuerdo que me viene a la mente cuando pienso en ti, es sin duda, las veces que venías a buscarme al colegio. Siempre tan guapo en tu berlingo color granate, aparcando en aquella calle llena de árboles grandes. Las veces que me dejabas ir en el maletero, cual camioneta.
Son tantos los recuerdos que tengo contigo. Aquellos jugos de naranja que me traías al cuarto cuando estaba enferma. Los miles de desayunos que me preparabas. Y que ahora sea yo quien te los haga.
Quien te lo iba a decir, eh abuelo.
Que ahora sería yo quien cuidara de ti, después de haberlo hecho tú por mi.  No me quiero ni imaginar el día que no vuelvas a repetirme "jodido y mal pagado", o "haber si llamas más".. No me imagino una vida sin ti. No la quiero si no es contigo.
Abuelo y padre a la vez. No sabría expresar todo el amor que tengo para ti y lo difícil que es verte envejecer cada vez más. Eso es lo más duro en la vida de alguien, ver como ya no camina como antes, o que ya casi no te ve.
Te echo mucho de menos abuelo, echo de menos tantas cosas de ti. Te amo más que a nada en el mundo, y te deseo un feliz cumpleaños desde la distancia.
El pilar mas imprescindible de mi vida se hace un poquito más mayor hoy.
Te ama, te adora y te quiere tu niña bonita.
 
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