18 de febrero de 2015

Mi nuevo vicio

Solo tengo cuatro paredes y una razón para volver a escribirte. Hace frío, y todo es tan vacío que hasta siento que sobro entre tanta oscuridad...'

Sé que correr tras tuya no es una buena idea, ya que nunca nadie pudo caminar sobre el agua. Llamarte tampoco suena coherente, ni recordarte, ni quererte...Nada tiene sentido, y mientras intento mentalizarme esa verdad absoluta me pierdo en la sensación que me provocan las ganas de olvidarte; su tacto suave, como cuando las yemas de tus ásperos dedos recorrían la curva de mis caderas, demasiado rápido como para poder frenar a tiempo y no cometer nuestro exquisito error.

•••

En fin; ya no tengo prisa, ni zapatos de charol, ni citas a las siete..
No te tengo, pero ya no importa tanto como cuando creí que eras lo único que cabía en mi bolsillo. Así que voy a centrarme simplemente en sentir cómo se congelan mis pies y escuchar—intentado no respirar para evitar confundir mi aire con los truenos.


Sin más, sin menos; sin ti.

Sin pensar y por pura necesidad acaricio a mi alma gatuna, que no se despega de mi helada, solitaria y desnuda espalda.. Me muerde el dedo corazón;recapacito. Y me levanto sobresaltada dándome cuenta de lo que acabo de hacer: te escribí, te confesé que sufría. Te necesité y te lo hice saber.

Soy una necia.

Pero eso no me duele. Ahora solo me sangra el dedo, o el corazón, o todo en uno,.. 

Lo que más nos gustaba era sentarnos en cualquier piedra del paseo,escuchar nuestras canciones preferidas y cantarle al atardecer. Cuanto soles despedimos, y cuantas noches pasé a tu lado. Me gusta poder expresarte de la mejor manera que se me ocurre todo lo que siento por ti. Haces que revivan tantos sentimientos dentro de mi cuerpo. Causante de mis delirios y de mis suspiros. 
¿Estaré perdiendo mi tiempo en escribirte? 


El tiempo es quien tiene el poder.

No hay comentarios:

Publicar un comentario