Sin más, emprendieron el camino de regreso a casa. Una tarde para el recuerdo con la esperanza de que pronto se volviera a repetir. La cercanía se notaba más, las semanas iban pasando y los sentimientos iban naciendo en ella sin casi darse cuenta. Lento, sin avisar, como si pretendiera sorprenderla en cualquier momento. Pero ya era una realidad, ya se había alojado aquella sensación de angustia en su interior. ¿Qué iba a pasar ahora? ¿Hasta dónde iba a llegar esta historia?
No hay comentarios:
Publicar un comentario