

La única diferencia que había era una que englobaba muchas otras.
No sé si entonces está bien llamarle "única". Ya aparecía en nuestra propia forma de hablar, utilizábamos la primera persona del plural para expresarnos y olvidábamos la primera del singular, incluso me atrevo a decir que era como "un solo alma, pero en dos cuerpos diferentes".
  Y nos conocimos, de forma imprevisible..Por eso creíste haberte enamorado de mi


 
No hay comentarios:
Publicar un comentario